11:59 27-11-2025

11 coches discretos que esconden motores de alto rendimiento

Jeep Grand Cherokee SRT8

Este SUV esconde un bloque serio: un musculoso HEMI V8 de 6.1 litros con 420 caballos de fuerza. Es el mismo motor que impulsó a los legendarios Dodge Challenger y Charger, lo que aporta al Grand Cherokee una dosis extra de carácter de deportivo que se nota.

Pontiac GTO

A primera vista, puro clásico estadounidense, el Pontiac GTO guardaba una sorpresa: el mismo V8 LS1/LS2 robusto usado en el icónico Chevrolet Corvette. Según la versión, entregaba entre 350 y 400 caballos de fuerza, una baza que le sentaba de maravilla.

Dodge Durango SRT

Un SUV familiar que no hace alarde; sin embargo, bajo el capó lleva un HEMI V8 de 6.4 litros con 475 caballos de fuerza. Esa combinación le permite sortear obstáculos con confianza y ganar velocidad más rápido que muchos deportivos.

Chevrolet SS

A primera vista, el Chevrolet SS parece una berlina sencilla, pero tras ese traje discreto escondía auténtico nervio de competición. Montaba el V8 LS3 del Corvette con 415 caballos de fuerza, convirtiéndolo en un rival inesperado para máquinas de alto rendimiento.

BMW M5 (E60)

Parecía la berlina ejecutiva de quinta generación de BMW en toda regla, pero bajo el capó vivía un V10 de 5.0 litros con 500 caballos de fuerza, el tipo de corazón que define el carácter de un coche.

Honda Ridgeline

La pickup discreta de Honda llegó con un V6 de 3.5 litros revisado con 280 caballos de fuerza. Menos ruido y más sustancia, y con el empuje suficiente para que las tareas diarias se sientan sin esfuerzo.

Dodge Magnum SRT8

¿Un simple familiar? Este no. Dentro acechaba un HEMI V8 de 6.1 litros con 425 caballos de fuerza, suficiente para codearse con muchos deportivos contemporáneos.

Volvo V70 R

Este Volvo parecía un familiar de lo más normal, pero sus dueños sabían la verdad: bajo el capó vivía un motor en línea turbo con casi 300 caballos de fuerza. Esa mezcla de confort y empuje lo convirtió en una revelación para quienes disfrutan de una conducción ágil.

Pontiac G8 GXP

Otra berlina estadounidense de rostro discreto y mecánica destacable. Bajo el capó se sentaba el conocido LS3, con 415 caballos de fuerza, lo que lo ponía en liza frente a deportivos auténticos.

Genesis GV70 3.5T

Incluso Genesis sorprende: este crossover premium aloja un V6 biturbo de 3.5 litros con 375 caballos de fuerza. Aquí el lujo se da la mano con un rendimiento realmente sólido.

Chrysler 300 C SRT8

Pese a su porte señorial, el Chrysler 300 C estaba lejos de ser contenido. Un HEMI V8 de 6.1 litros con 425 caballos de fuerza permitía saborear la velocidad junto a un aplomo que inspira confianza.