23:36 06-12-2025

Cuándo bajar la presión de los neumáticos en nieve y cuándo no

El consejo invernal es de sobra conocido: sacar un poco de aire de los neumáticos para abrirse paso en la nieve. Como explicó Dmitry Novikov a 32cars.ru, el truco funciona, pero solo en superficies sueltas y lejos del asfalto. En nieve virgen o por senderos forestales, bajar la presión permite que la goma se aplane, aumente la huella de contacto y mejore el agarre. Incluso así conviene actuar con mesura: no menos de 1,0–1,2 atmósferas y, superado el tramo difícil, volver a la presión normal.

En asfalto, nieve compactada o hielo, el efecto es el contrario. Un neumático con poca presión se deforma más, pierde aplomo y alarga las distancias de frenado; además, crece el riesgo de dañar el flanco, destalonar y perder el control. Ahí el precio a pagar supera con creces cualquier ganancia.

Novikov subraya que reducir la presión es un recurso temporal estrictamente para uso fuera de carretera. En ciudad, la apuesta sensata son unos buenos neumáticos de invierno y mantener las presiones indicadas por el fabricante. Tiene lógica: la ventaja puntual en la nieve blanda no compensa las concesiones que exige en el tráfico del día a día.