Función patentada: detiene el coche si hay puertas abiertas
Seguridad al arrancar: el coche se detiene si una puerta o el maletero están abiertos
Función patentada: detiene el coche si hay puertas abiertas
Descubre la función de seguridad que frena el vehículo si una puerta o el maletero quedan abiertos al arrancar o iniciar la marcha evitando riesgos y fallos.
2025-11-06T14:50:20+03:00
2025-11-06T14:50:20+03:00
2025-11-06T14:50:20+03:00
Una función de seguridad patentada detiene automáticamente el vehículo si una puerta o el maletero quedan abiertos justo después de arrancar el motor o en el momento en que el conductor intenta ponerse en marcha.El objetivo es impedir cualquier movimiento involuntario que pueda elevar el riesgo de choque o poner en peligro a peatones y otros usuarios de la vía. Al actuar justo en ese instante delicado, el sistema evita que un descuido menor se convierta en algo serio. En el uso cotidiano, ese tipo de ayuda suele marcar la diferencia.La intervención se centra en escenarios en los que el conductor no presiona el pedal de freno con suficiente firmeza para mantener el coche inmóvil tras una parada; por ejemplo, cuando los pasajeros están bajando o alguien recoge objetos del maletero. Tiene pleno sentido en maniobras breves, cuando la atención se divide y la presión sobre el pedal tiende a relajarse.
función de seguridad patentada, puertas abiertas, maletero abierto, frena el vehículo, al arrancar, iniciar la marcha, evitar movimiento involuntario, riesgo de choque, peatones, sistema automotriz, pedal de freno
2025
David Carter
news
Seguridad al arrancar: el coche se detiene si una puerta o el maletero están abiertos
Descubre la función de seguridad que frena el vehículo si una puerta o el maletero quedan abiertos al arrancar o iniciar la marcha evitando riesgos y fallos.
Una función de seguridad patentada detiene automáticamente el vehículo si una puerta o el maletero quedan abiertos justo después de arrancar el motor o en el momento en que el conductor intenta ponerse en marcha.
El objetivo es impedir cualquier movimiento involuntario que pueda elevar el riesgo de choque o poner en peligro a peatones y otros usuarios de la vía. Al actuar justo en ese instante delicado, el sistema evita que un descuido menor se convierta en algo serio. En el uso cotidiano, ese tipo de ayuda suele marcar la diferencia.
La intervención se centra en escenarios en los que el conductor no presiona el pedal de freno con suficiente firmeza para mantener el coche inmóvil tras una parada; por ejemplo, cuando los pasajeros están bajando o alguien recoge objetos del maletero. Tiene pleno sentido en maniobras breves, cuando la atención se divide y la presión sobre el pedal tiende a relajarse.