Según un boletín informativo especial de General Motors, algunas unidades del Chevrolet Malibu 2022 pueden presentar un funcionamiento incorrecto del turbocompresor. Esta situación puede encender el testigo de Check Engine y, en ciertos casos, mostrar un aviso de potencia reducida del motor.

General Motors ha reconocido el problema y ofrece a los propietarios de vehículos Chevrolet Malibu afectados una garantía ampliada de 15 años o hasta 150.000 millas (unos 241.000 kilómetros). Según los términos de esta cobertura, el fabricante asumirá sin coste el diagnóstico, la sustitución del turbocompresor averiado y todas las piezas necesarias.

Además, los clientes que ya hayan pagado la reparación por cuenta propia hasta el 3 de noviembre de 2025 pueden presentar una solicitud de reembolso a la compañía.

También se indica que la producción del Chevrolet Malibu terminó oficialmente en noviembre de 2024, cuando el último ejemplar salió de la línea de montaje. El modelo ya no se fabrica en General Motors.

En conjunto, esta protección extendida se perfila como un paso sensato para amortiguar el impacto de un posible fallo del turbo ahora que el modelo ha salido de producción. La promesa de diagnósticos gratuitos y sustitución de piezas ayuda a disipar buena parte de la inquietud que provoca un testigo inesperado y sostiene la confianza de los propietarios mientras el Malibu pasa de la gama vigente a un estatus de legado, dejando la impresión de una decisión pragmática pensada para evitar sobresaltos al cliente.