La Comisión Europea ha dado luz verde a más de 600 millones de euros para proyectos destinados a ampliar la infraestructura de combustibles alternativos en 24 países de la UE. En total, 70 iniciativas han superado el corte, entre ellas el despliegue de estaciones de recarga eléctrica, puntos de repostaje de hidrógeno y equipamientos para los sectores marítimo y aéreo. La intención es acelerar el paso a soluciones más limpias y hacer más sencilla la adopción del coche eléctrico.

Los fondos respaldarán la instalación de más de 1.000 cargadores de 150 kW para vehículos comerciales ligeros, cerca de 2.000 estaciones de 350 kW y 586 puntos de 1 MW para camiones pesados. También se contemplan 38 estaciones de hidrógeno. En los puertos, los operadores introducirán sistemas de suministro eléctrico desde tierra, junto con equipos preparados para manejar amoníaco y metanol. La presencia de puntos de 1 MW marca una apuesta clara por el transporte pesado, donde la potencia es determinante para no sacrificar operativa.

Un apoyo específico modernizará además 16 aeropuertos europeos, cuyos servicios en tierra están encaminados a electrificarse. En la lista figuran proyectos en Alemania: Stadtwerke Munchen recibirá 3,8 millones de euros para electrificar su flota de autobuses, mientras que Eon Drive Infrastructure destinará su subvención a ampliar una red de recarga para el transporte de mercancías. En conjunto, estos pasos refuerzan el impulso comunitario hacia vehículos más rentables y menos emisiones y, sobre todo, ponen el foco en el transporte pesado y los puertos, donde los resultados suelen verse antes.